Permite que la Diosa Isis te reciba con sus bendiciones.
Me encanta trabajar con la energía de la Diosa Isis. En mi vida fue un antes y después cuando comencé a devocionarla y honrarla en mi vida.
Sentí que se llenaba un huequito que había en mi interior del amor de esta Gran Madre de todos los tiempos. Me siento reconfortada, acogida, nutrida y tranquila cuando dejo entrar la energía de Isis en mí.
Desde que trabajo con Ella mi vida se volvió más tranquila emocionalmente, más sosegada, ya que comencé a tomarme las cosas desde otro punto de vista más amplio y más flexible.
También no me tomaba las cosas demasiado en serio y comencé a estar más enfocada en mi interior y no tanto en el afuera, cosa que me ayudó a no sobrecargarme demasiado con la demanda y energía externa.
Isis para mí es como una madre que me consuela cuando lo necesito y me orienta cuando me siento perdida. Siempre está conmigo, en mi corazón.
También me ha ayudado a tomar decisiones cuando no sabía muy bien hacia dónde dirigirme e Isis también me ha dado respuestas a dudas que necesitaban ser contestadas. A veces Isis es escueta pero siempre recibo su orientación.
La formación también tiene diferentes símbolos sagrados que me han permitido volver a casa, al hogar de nuestra Gran Madre, que es Sirio y que podemos ir tantas veces necesitemos. Estar en el hogar es volver a sentirnos espíritu y en unidad con todo lo que nos rodea.
Me ayudaron también a ampliar mi intuición con el tercer ojo siendo más aguda en mis percepciones y adelantándome muchas veces a situaciones que iban a pasar. Trabajar con el tercer ojo me encanta ya que puedo utilizar mi don tanto de manera personal como profesional.
Y también con los símbolos sagrados me siento más protegida, de hecho, los utilizo para proteger mi casa, mi centro y a mí misma. No hay nada externo de baja vibración que pueda penetrar en esta capa protectora.
Siento que trabajar con Isis es muy versátil: nos ofrece todo lo que podamos necesitar.
La energía femenina y masculina de Isis nos ayuda a…
Estar más en contacto con nuestras necesidades, por lo que nos cuidamos más.
Sentirnos nutridas y sostenidas por su energía y cuidado.
Sentirnos acompañadas pase lo que pase en nuestra vida.
Sentirnos protegidas y limpias energéticamente trabajando con sus símbolos sagrados.
No tener tantos altibajos emocionales y estar más centrad@s.
Recoger nuestro poder personal para no depender tanto del exterior.
Volver al origen de nuestra esencia, nuestro hogar cósmico, para que recordemos nuestra procedencia y nuestra misión aquí en la Tierra.
Recibir orientación cuando lo necesitemos, en cualquier circunstancia de nuestra vida.
Trabajar nuestras emociones para que podamos comprenderlas y amarlas.
Focalizar nuestra mente y corazón en nuestros objetivos, recuperando nuestra fuerza y seguridad personales.
Espero que la energía de Isis te acompañe siempre en tu camino.
Bendiciones.
Sandra Gamero
Maestra en Los Misterios de Isis
